Somos una pequeña granja familiar situada en medio de la naturaleza a pie de monte. Nuestras gallinas disfrutan del campo durante todo el dia comiendo un pienso especialmente diseñado para ellas equilibrado y basado en cereales y complementado con hierbas y bichillos del lugar.

Nuestra prioridad es el bienestar de nuestras gallinas, mimándolas y dándoles todo el tiempo posible en libertad, lo que unido a su alimentación hacen de este producto un sabor que recuerda a los de nuestra niñez.

Cada día recogemos, sellamos y envasamos nuestros huevos manualmente y los repartimos de manera personalizada, mano a mano a  nuestros clientes.

Su calidad es nuestro sello y nos esforzamos para que todo esté perfecto.